Ya no se quien soy...

Bueno, hoy toca recuperar algunos textos del cajón... bueno, de hace unos 20 dias... pero ya forman parte del cajón.



Ya no sé quién soy,
ya no sé quien soy sin tu amor.
De día estoy como un zombi,
por momentos me pierdo, estático,
con la vista fija en un punto distante,
tal vez buscando a lo lejos el brillo de tus ojos.
De noche padezco de insomnio,
tendido en mi cama,
mirando el techo en la oscuridad,
buscando algún pensamiento que me deje dormir,
algún pensamiento en el que no estés vos.
En otros momentos pierdo el olfato,
o lo que es peor,
todo aroma me repugna,
porque ninguno de ellos es el de tu perfume,
por mas que intento no percibo tu olor.
A veces la vista se me nubla,
las lagrimas convierten todo en borroso,
y sólo se distingue con extraña claridad...
tu rostro.
Otras veces me pesan los brazos,
no tengo tus abrazos,
y me duelen los dedos si no rozan tu espalda,
si no frotan tu pelo.
Tirado en la cama me siento mas solo que de costumbre,
mis rodillas delatan un espacio entre ellas en que algo falta,
faltan tus piernas,
tu cuerpo entrelazado al mío,
me falta tu calor,
me falta tu piel.
Mis labios se secan inexplicablemente,
será que también sufren,
ya no pueden besarte.
Mis uñas hoy duelen mas que nunca,
ayer estaban creciendo, hoy son poco mas que carne.
En esta maldita casa el teléfono no para de sonar,
y ese sonido destruye mis oídos,
porque se que del otro lado no responderá tu voz,
no responderá tu voz.
No puedo entablar ninguna conversación,
tras pocas palabras ya pierdo el hilo,
pensando en vos, y en que andarás haciendo.
Hoy lo que tanto critiqué de cierto repertorio,
se ha convertido en repertorio propio,
porque sólo suenan un par de canciones en mi cabeza,
y todas son tristes, todas hablan de aquello que perdiste.
Hoy no encuentro canciones felices,
hoy no encuentro dulces sueños,
hoy mis brazos no abrazan el aire soñando tu cuerpo,
o sí lo hacen, pero es tan solo un sueño.
Hoy mis ojos ya no brillan al recordarte,
mas allá del brillo de las lágrimas.
Hoy mi corazón aún grita te amo,
pero parezco un loco, hablando en vano,
gritándole al viento, un viento que no llega a tus oídos,
en el cual mis palabras no dejan de ser aire.
Hoy estoy más perdido que nunca,
hoy estoy muy mareado,
sin saber cómo se hace para no pensarte.
Hoy estoy completamente desconcertado,
hoy ya no sé quien soy,
ya no sé quien soy sin tu amor...